lunes, 29 de septiembre de 2008

Otro lentazo y van...

Por acá cerca preguntaban por un lentazo de nuestra década, y con los escasos datos que daban creo que era este, y si no era este no importa, bien sirve la oportunidad para recordar a Jim Diamond y su único éxito "Debí comprenderlo". La data dice que es de 1984 pero yo lo tenía en un TDK grabado en la disquería Waikiki de Córdoba en 1987, o sea que para mi es del '87.
Discusiones al margen, es de los '80 y eso no lo puede negar nadie.
Disfrútenlo, y si pueden abracen a alguien que tengan cerca... y después me cuentan.

jueves, 4 de septiembre de 2008

¿Por qué recordamos tanto?

Estas reflexiones no son originalmente mías, sino de un periodista cordobés llamado Sergio Zuliani. El se preguntaba porqué recordamos tanto algunos objetos de aquellos años nuestros. Y respondía algo muy cierto: en nuestra década no había tanta variedad de cosas como hoy, y conseguirlas costaba (dinero o esfuerzo). Por ejemplo, un cassette costaba comprarlo, y al hacerlo lo oíamos una y otra vez. A menos que fuéramos ciudadanos pudientes (yo no lo era) lo más probable es que el próximo cassette lo obtuviéramos tiempo después (recordemos que recién a fines de la década se podían grabar en los doble casetera). Hoy no. Hoy se pueden bajar varios discos en un día. Obtenerlos ya no cuesta nada, y como dice el dicho: "lo que cuesta, vale".
Lo mismo ocurría con cosas como los juguetes. No había miles de opciones, había menos. Por eso tanto recordar cosas.
Triste futuro el de los niños y jóvenes de esta era que va a estar huérfano de recuerdos como nuestro presente (futuro de nuestro pasado ochentoso).
Entonces, felices los que vivimos esa época, tendremos con qué abrigarnos del frío del paso de los años. Y vaya que nos sobrará abrigo.
Les debo fotos o videos. Quería reflexionar con ustedes.
¡Hasta el próximo recuerdo!

lunes, 7 de julio de 2008

Farándula ochentosa I: los impresentables

La farándula y sus cuestiones han existido desde siempre, pero poco a poco se la ha ido transformando en un tema nacional. en los '80 no era la payasada que es hoy pero sí ya existían seres que pululaban en ella que eran IMPRESENTABLES. Algunos han sobrevivido hasta hoy y lo siguen siendo, pero vamos a recordarlos como eran entonces gracias al material que conseguimos en http://www.lamemoriaqueperdimos.blogspot.com/
Con ustedes... estos impresentables.
Moria Casán y Mario Castiglione (RIP)


Los muñequitos de torta de Bambino Veira y Sonia Pepe


Valeria Lynch (alias "voz susurrante") y Gabriela Sabatini (nunca me expliqué qué le veían para decir que era linda, siempre fue un camionero en el cuerpo de una señorita)

Alejandro Lerner cuando aún hacía canciones con cierto compromiso (y no las que vinieron después, todas iguales "te amo, te quiero, te adoro") se mostró así: IMPRESENTABLE

Las abuelas de Mirta Legrand y Susana Gimenez (o me van a decir que son ellas dos hace 20 años. Jamás les creería)

Un pobre equino batiendo el record mundial de arrastre de toneladas. Podrían haber elegido otroa forma de presentarla a María Marta Serra Lima ¿no?


Cuando aún nadie los conocía, ya eran super impresentables, ni hablar si vestían unas botas fuera del pantalón. Era para llevarlos presos. Señoras y señores... Silvia y Guido Süller

Y no sigo más por miedo a causarles pesadillas.

domingo, 11 de mayo de 2008

El origen del gancho publicitario más usado

Los que hacemos blogs (aunque hace tiempo que yo no hacía nada) solemos abrevar de otros blogs (lease copiar pero con onda). Por eso voy a transcribir casi textual lo que mi estimadísimo colega de www.todopor2clicks.com.ar posteo hace unos días porque me pareció un símbolo de nuestra década. Aquí va:
Los de HITACHI fueron unos precursores.
En una época en la que:
* si alguien quería venderte un aparato te mostraba el aparato
* si alguien quería venderte un fernet te mostraba un fernet
* si alguien quería venderte un desodorante te mostraba un desodorante
* si alguien quería venderte un juguete te mostraba el juguete
Ellos, que querían venderte un televisor... te mostraron colas.
Aqui podemos ver la publicidad del año '81 y censurada por el gobierno militar por impúdica.
Y no dejen de visitar el blog de Todo por 2 clicks, no se van a arrepentir

lunes, 24 de marzo de 2008

El signo monetario más breve del mundo

Y si no fue el más breve, debe haber sido uno de los de más corta duración. Entre 1983 y 1985, tuvimos en Argentina el peso argentino. Su símbolo fue $a. Entró en vigencia el 1º de junio del '83 y cada peso argentino equivalía a 10.000 pesos ley. como la inflación no paró de crecer, al cabo de dos años se lo reemplazó por otra plata : el austral.
Para que recuerden, les dejó unos billetitos y unas moneditas de esa época, con la que seguro compraron Thriller de Michael Jackson, las Topper modelo Guillermo Vilas o las entradas para ver Flashdance o Breackdance en el cine.

domingo, 23 de marzo de 2008

La propaganda del chocolate más rico

Explicación cortita: para mí este es el mejor chocolate que hay y esta publicidad es de 1983. Seguro que la recuerdan.

lunes, 3 de marzo de 2008

tac, tac, tac, tac... (parte II)

Alguna vez me enteré que los reyes magos no existían, que eran los padres. Me desilusioné, pero aún me quedaban más cosas en qué creer. Más adelante descubrí que Papá Noel también eran los padres, y así mis fantasías de la infancia dejaron de existir. Debí crearme, entrando en la adolescencia nuevas cosas en las que pudiera creer. Una de ellas fue que la batería de GIT era electrónica. Y no lo inventé yo, todos lo sabíamos. no había internet y mucha información sólo corría de boca en boca. Nosotros la recibíamos y la incorporábamos como verdades reveladas.
Pero nunca falta el aguafiestas que viene a recordarnos que más allá de nuestras fantasías existe la realidad.
Y eso es lo que me pasó después de haber posteado la información de GIT. Uno de los comentarios que dejaron explicó la cruda realidad: NO TENIAN BATERIA ELECTRONICA. Ya recuperado de tan horiible revelación, les cuento como (dicen) que era, y discúlpenme si les arruino la ilusión.
en un programa de Mario Pergolini y Ari Paluch, Willy Iturri confesó que lo único que él hacía era colocar una placa de metal debajo de uno de los parches del tambor. Así de simple. Así de dolorosa suele ser la verdad.
Agradezcanle a chica_rumiante, la desmitificadora.
Snif...

domingo, 2 de marzo de 2008

El tiempo pasa

Que nuestros años '80 fueron maravillosos no merece refutación. Pero tanto para nosotros como para esas estrellas de la tele y el cine que caracterizaron esa época el tiempo ha sido implacable. Y aunque es sabido que el paso de los años no se detiene, recordamos a esa gente con una idea inconsciente de que aún están igual, sobretodo si somos de volver a ver sus películas y sus series.
Pero no es así. Como prueba bastan estas fotos que extraje de http://www.zonacinemania.com/
Aqui podemos verlos tal cual son hoy. Y a pesar de los avances de las cirugías y demás yerbas, la diferencia, muchas veces es fuerte.
Pues que sea un consuelo para las veces en que nos torturamos viendo nuestras fotos de aquellos años.
El muestrario de hoy está compuesto por:

BJ

Greg Evigan, veinteañero en la época de la serie del camionero, hoy cuenta con 53 años. Nadie dice nada acerca de la situación actual del mono.

V- Invasión extraterreste
Marc Singer (Donovan): Hoy tiene 59 años. Desde "V" trabajó en películas de bajo presupuesto y es profesor de box y artes marciales.


Jane Badler (Diana): Cuenta en la actualidad con 53 años y trabaja en teatro y comedias musicales (que también es teatro). Aparentemente no le ha dado duro a las cirugías.


Chip's

Erik Estrada (Francis Poncharello): cumple 59 pirulos en estos días. Lo más recordado de sus trabajos posteriores son sus comerciales de "Reduce fast fat" donde nos cuenta que era gordo y quedó bárbaro después de tomar esa porquería.

Larry Wilcox (Jon Baker): 60 años y dueño de una productora de TV y una empresa de software. Nada mal.
Elliot (el amigo de ET)

Henry Thomas: ya ha crecido bastante y tiene 37 años. Se lo ve bien. sigue actuando y hasta trabajó en películas importantes como "Pandillas de Nueva York"
Kelly LeBrock (una chica al rojo vivo)

¡¡¡Destruida!!! Tiene 47 años (parecen varios más). Se casó con Steven Seagal, luego se divorció y la plata no le alcanzó ni para una buena crema antia age. ¡Pooooobre!
Jennifer Beals (Flashdance)
De las mujeres, es la que mejor ha quedado a pesar de los años. Hoy tiene 43 y ha seguido trabajando en cine y TV con regular éxito.
Ralph Macchio (Daniel LaRusso)

Tiene 45 añitos. Participó en algunas cosas en cine y TV, pero en lo que mas se destaca es en teatro.

¿Vieron que los años no han pasado sólo para nosotros?

Llamado a la solidaridad

Todos o casi todos los que hacemos un blog tenemos un enorme placer en poder compartir un tema que nos gusta con ustedes. Y más grande es el placer al ver como el contador de visitas crece, lo que significa que otros cibernautas ingresan a ver nuestro modesto aporte. Pero mayor es la satisfacción cuando comentan algo en cada una de las entradas. Ahí sentimos que lo que hemos hecho ha valido realmente la pena, aunque sea para una persona. Por eso el llamado a la solidaridad. Si tienen tiempo después de ver la entrada, si no les molesta, dejen un comentario, para decirme que les gustó, para aportar información de ese tema, para sugerir o para decirme que les pareció una porquería.
Por favor COMENTEEEEEEEEN!!!!

sábado, 23 de febrero de 2008

Tac, tac, tac, tac...

¿Quién no se acuerda de la batería de G.I.T.? Ese tac tac tac de la bata electrónica nos sonaba todo el tiempo en la cabeza y todos queríamos tocar aunque sea una vez una, que por entonces era tan rara, sin parches ni platillos.
Pero ¿quiénes eran estos muchachos?
Pablo Guyot, Willy Iturri (el de la batería) y Alfredo Toth, habían sido músicos de Raúl Porchetto y de Charly García hasta que decidieron largarse por su cuenta y en 1984 grabaron su primer disco "G.I.T.". En el '85 publicaron su trabajo más recordado, el disco negro (oficialmente no se llamaba así pero todos lo reconocíamos de esa manera). Grabaron dos discos más cuando habían perdido algo de fama y se separaon momentáneamente hasta el '92 cuando reaparecieron con una nueva onda, medios heavys con tanta mala suerte que de su disco, la canción que tuvo más repercusión fue una balada ("Para Pao").
Pero lo que nos interesa es nuestra década y seguiremos recordando por siempre temas como "El juego comienza", "La calle es su lugar (Ana)", "Siempre fuiste mi amor", "No hieras mi corazón", "Aire de todos", etc. y sobretodo aquella batería tan especial tac, tac, tac, tac...

martes, 19 de febrero de 2008

A la década la empezamos con esta plata

En nuestra década, en Argentina, tuvimos tres signos monetarios. Empezamos con uno, cambiamos a otro y finalizamos con un tercero (en los '90 volvimos a cambiar).
El primer dinero que tuvimos fue el peso Ley 18.188 ($Ley), que había surgido en 1970 y se extendió hasta 1983. Lo conocimos popularmente como "peso ley".
Al igual que los otros pesos (o australes) que tuvimos, fue víctima de la inflación por lo que se hacía necesario emitir más y más moneda y con valores mayores, llegandose a la locura de tener billetes de 1.000.000 de pesos. Lo más gracioso (o triste) es que usabamos ese millon para ir a hacer las compras al supermercado, no para comprar una mansión con pileta y parque.
Para que recuerden, les dejo unas bellas imágenes de billetes y chirolitas que seguro poblaron la cartera de la dama o el bolsillo del caballero hace algunos añitos.
Si quieren deleitarse con todos los billetes de esos tiempos, vayan a www.billetes argentinos.com.ar

domingo, 3 de febrero de 2008

Si dio resultado afuera... pues lo copiemos

Ya mostramos lo que pasó cuando un grupo importante de cantantes norteamericanos se reunió para grabar una canción benéfica para los hambrientos de Africa. Dicha historia se repitió en Inglaterra... y aquí, por supuesto, tan afectos que somos por copiar .
Como nos cuenta el blog http://www.soloquinceminutos.blogspot.com/ , en nuestro país (Argentina) se hizo lo mismo para recaudar fondos para los damnificados por las inundaciones de 1985 en Chaco.


Así se grabó "Argentina es nuestro hogar donde se juntaron 39 artistas que grabaron un disco con esta canción y agregaron otras, ya como solistas.


Participaron Sandro, Sergio Denis, Víctor Heredia, Valeria Lynch, Silvana Di Lorenzo, Miguel Cantilo, Jairo, María Marta Serra Lima, Juan Ramón, Marilina Ross, Palito Ortega (todavía no era un político corrupto), Sandra Mihanovich, Cacho Castaña, Leo Dan, Cesar Isella, Estela Raval, Manolo Galván, Julia Zenko, Tormenta, Paz Martinez, Gian Franco Pagliaro, Juan Marcelo, Elio Roca, Ramona Galarza, Fernando de Madariaga, Marcelo San Juan, Guillermo Fernandez, Leonardo Favio, Alejandra Aldao (¿¿¿quién???), Bárbara Bouze (otra vez ¿¿¿quién???), Argentino Luna, Orlando Netti, Carlos Nilsson (de nuevo ¿¿¿quién???), Roberto Rimoldi Fraga, Julio San Diego (disculpenme ¿¿¿quién???), Carlos Torres Vila y el trío San Javier.

Pero el éxito fue esquivo y el disco pasó al olvido, no así esta canción que escuchamos varias veces y en diferentes medios por aquellas épocas.

¿Lo recuerdan? Aquí se los dejo para que refrescarles la memoria.

martes, 22 de enero de 2008

Vamos a la playa

Como mañana inicio mis ¿merecidas? vacaciones y parto para la playa, les dejo hasta mi regreso un éxito de la primera mitad de nuestra década: "Vamos a la playa" que cantaba el grupo Righeira, un dúo italiano formado por Stefano Rota y Stefano Righi en 1981.
En 1983 la pegaron con esta canción y con otra más llamada "No tengo dinero" que a mi no me gustaba tanto como "Vamos a la playa"
No se pierdan los relojitos (no sé como no se lo incrustan en un ojo) ni el rulito en la frente de uno de ellos.
Y si hoy pueden parecer medio tontos por el pasito que hacen, en esa época no era así ¿o no nos movíamos igual cuando íbamos a bailar? ¡Claro que sí!
¡Nos vemos a la vuelta!

domingo, 13 de enero de 2008

Casos policiales: la dra. Giubileo

Uno de los casos policiales más recordados de nuestra década aquí en Argentina fue la desaparición misteriosa y hasta hoy no esclarecida de la dra. Cecilia Giubileo. Ayuda a que, seguramente, la mayoría lo recordemos el gran despliegue del noticiero Nuevediario ("las dos caras de la verdad"), que siguió el asunto durante mucho tiempo como a ellos les gustaba, mucha hipótesis sin sustento real y mucho morbo.
Todo empezó la noche del 16 de junio de 1985 cuando la doctora fue vista por última vez en la colonia para enfermos mentales Open Door o Colonia Montes de Oca, de la provincia de Buenos Aires.

Las investigaciones posteriores no pudieron revelar nada en concreto, sólo el desamparo de esos dementes.

Por más que Nuevediario pasó mucho tiempo tratando de encontrar una respuesta sensacionalista que incluyó desenterrar huesos que luego comprobaron que eran de animales, el cadáver nunca apareció y jamás se pudo saber que sucedió.

Hasta hoy sigue siendo un misterio.

miércoles, 9 de enero de 2008

De cassettes, grabaciones y otras yerbas

En nuestros años '80, había dos formas de poseer música: discos o cassettes. Pero los discos eran cosa del pasado. Si uno quería estar a la vanguardia de la tecnología tenía que tener su música grabada en esos objetos rectangulares.



Hoy las opciones son muchas más (MP3, CD, PC, minidisc).

Nosotros, los cancheros que usábamos cassette (en la segunda mitad de la década hasta los que no eran cancheros los usaban), teníamos dos opciones: comprar los originales o adquirir los vírgenes para grabarlos.

Esto último, al igual que hoy, era ilegal pero, al igual que hoy, lo hacíamos.

Lo primero era comprarlo. Los había de diversos precios y calidades. Unos medio truchos que a la corta o a la larga te traían problemas, y los de calidad (Basf, Sony o los más usados: los TDK).

Si decidíamos comprar los de calidad, teníamos más cosas que decidir, por ejemplo su duración. Había de 45 minutos (justo para grabar un cassette original completo), de 60 minutos (los más populares) y de 90 minutos (entraba un cassettre original de cada lado pero a algunos grabadores les costaba tirarlos, y si el walkman andaba flojo de pilas, ni lo movía).

Y si ya habíamos decidido de qué duración compraríamos, quedaba un último elemento a decidir: común o de metal (más caros estos últimos). Casi siempre comprábamos el común (a menos que nos quisieramos hacer los platudos).

Con el susodicho cassette en nuestro poder, hasta que aparecieron los grabadores doble casetera, sólo podíamos grabar canciones de la radio, donde solían quedar las voces de los locutores al principio o al final de la canción (¡nunca se callaban!), y los enganches entre tema y tema eran cosas deplorables (cortes abruptos). Un amigo grabó "Nacido en USA" de Bruce Springsteen y lo enganchó con "No soy de aquí ni soy de allá" de Facundo Cabral en lo que ha sido la unión más asquerosa que he oído. Otros inconvenientes eran que al ir grabando el cassette, queríamos oir lo que habíamos adquirido antes de que el cassette estuviera completo, y solíamos meter mal los dedos en las teclas y en vez de play apretábamos rec y lo que habíamos grabado se iba borrando lenta e indefectiblemente. ¿Porqué? Porque tenían unas pestañitas en la parte inferior que oprimían un botoncito en el aparato para poder grabar. Sin ellas, el cassette no se grababa. Cuando terminábamos de ocuparlo, se las sacábamos, pero al tiempo, si nos cansábamos de lo que tenía, o lo necesitábamos y no podíamos comprar otro, le poníamos un papelito en el huequito que había dejado la pestañita ausente y solucionábamos el problema.
Otra forma de grabar un cassette de otro era hacerlo andar en un grabador y poner el micrófono de otro grabador pegado al parlante. El resultado era desastroso pero no había alternativa para tener un cassette original de un amigo.
O si no, podíamos llevarlo a una disquería (se llamaban así aunque vendieran cassettes) para que nos grabaran los temas que le proporcionábamos en una lista. Esta grabación, obviamente, también era ilegal, pero de mejor calidad y con unos enganches perfectos.
Todo cambió cuando aparecieron los grabadores doble casetera. Nos reuníamos en la casa del amigo que se lo había podido comprar y cada uno de nosotros llevaba sus cassettes y nos pasabamos horas grabando y grabando hasta que todos teníamos en nuestro poder todas las canciones de los otros.

También ocurría que el manipuleo excesivo del elemento lo deteriorara. Si se le cortaba la cinta, había que abrirlo con un cuchillo con punta sacando cada tornillito, reacomodar la cinta y pegar los extremos divididos con cinta transparente ("Scotch" para nosotros), eso sí había que pegarlas por debajo, pero como al cortarse, una pequeña parte se había estirado, debíamos eliminarla, así que cuando se llegaba a esa unión, la canción pegaba un salto hasta que se normalizaba la reproducción.
Otro inconveniente era que se depegara esa pequeñísima goma espuma de la parte superior donde asentaba la cinta al ser reproducida. En ese caso, le colocábamos un pedacito de algodón... ¡y que siga la música!
Una cosa que a mi me molestaba era que me prestaran un cassette grabado y que en el papel de su cajita no le hubieran anotado el nombre de las canciones ¡Qué bronca!
Aún tengo una caja con más de cien cassettes (originales y grabados) pero ya no los escucho, ya me modernicé y los tengo en la PC o en CDs.
Ya no hay trabajo artesanal para escuchar música. Hoy podemos escuchar más y mejor, pero aquellas formas de conseguir música, les aseguro, no se pueden olvidar.